lunes, 15 de octubre de 2012

El ayuno y la oración sincera


Ayunar
Esta compuesto por un verbo de  accion , y significa abstenerse voluntariamente de ingerir alimentos y bebidas durante cierto tiempo. Un tiempo que acompañado de una oración sincera puede fortalecernos espiritualmente, nos acerca a Dios, y ayuda a prepararnos y prepara a otras personas para recibir Sus bendiciones.

En una ocasión, el Salvador expulsó a un demonio que estaba en un muchacho y usó esa experiencia
para enseñar a Sus discípulos acerca del poder de la oración y del ayuno. Sus discípulos le
preguntaron: “¿Por qué nosotros no pudimos echarlo fuera?”. Jesús contestó: “Por vuestra
incredulidad; porque de cierto os digo, que si tuviereis fe como un grano de mostaza, diréis a este
monte: Pásate de aquí allá, y se pasará; y nada os será imposible. Pero este género no sale sino con
oración y ayuno”. (Véase Mateo 17:14–21).

Me maravilla este  relato por la enseña que Jesus nos da , la oración y el ayuno pueden proveer fortaleza adicional  a fin de recibir la ayuda o el perdón que deseamos, pero muchas ocasiones para vencer nuestras debilidades no es suficiente una oración sincera tiene que ir acompañada de un ayuno.

Podemos ayunar con muchos fines como:
a. Expresar gratitud (Lucas 2:37; Alma 45:1)
b. Pedirle a nuestro Padre Celestial
b1. bendiga a los enfermos y a los afligidos
b2. recibir revelación personal y a convertirnos a la verdad (véase Alma 5:46; 6:6);
b3. recibiremos fortaleza para resistir la tentación (véase Isaías 58:6);
b4. para recibir guía para dar a conocer el Evangelio
b5. magnificar nuestros llamamientos en la Iglesia
b6. puede acompañar al pesar o al llanto justo (Alma 28:4–6; 30:1–2)

No hay comentarios:

Publicar un comentario