La Ignauracion comienza con 3 etapas (1)centrada en la consciencia histórica del país y que conecta, especialmente, con la revolución industrial, (2) rendirá homenaje a la creación de la sanidad pública británica (NHS) tras la II Guerra Mundial y a la literatura británica, (3) más moderna, revisará las décadas desde 1960 hasta la actualidad a través de la música popular.
La interpretación de historias como Peter Pan , Harry Potter, Mary Poppins La escritora británica J.K.Rowling, autora de la saga del joven mago Harry Potter, aparecía para leer el fragmento inicial del clásico del escocés J.M.Barrie, Peter Pan. El acompañamiento musical lleno las historias de emoción del inglés Mike Oldfield, Rowling, abrió la sección de la ceremonia diseñada por el cineasta británico Daniel Boyle inspirada en los cuentos infantiles.
El maligno Voldemort hizo aparición ante las 62.000 personas que abarrotaban el Estadio Olímpico de Stratford, al este de Londres, acompañado por otros villanos de la literatura británica. No faltó el capitán Hook con su garfio, ni la Cruella de Vil de los 101 dálmatas, para tratar de asustar a los niños que dormían apaciblemente en decenas de camas dispuestas en el centro de estadio, en la recreación de un conocido hospital infantil.
En la ceremonia de Boyle, el cuento terminó bien y la niñera más famosa del cine, la conocida Mary Poppins, apareció en Stratford para desvanecer las pesadillas y continuar con la ceremonia que inaugura los terceros Juegos Olímpicos que celebra Londres en su historia.
Fue la llegada de la reina Isabel II junto a James Bond al Estadio de Stratford que causó conmoción lanzándose en paracaídas con James Bond desde un helicóptero. Ella participó de este filme a sus 86 años con buen ánimo y cumplidas seis décadas en el trono británico, la soberana realizó lo que la organización de Londres 2012 calificó como "la primera interpretación" de su vida, rodada en el Palacio de Buckingham y en la que se interpreta a sí misma, junto al famoso agente secreto siempre al servicio de su Majestad.
El filme llamado "Happy and Glorious" por uno de los versos del himno británico, comienza en Buckingham, donde la Reina y el actor Daniel Craig, el último James Bond, se montan en un helicóptero que sobrevuela Londres hasta llegar al Estadio Olímpico. Bond abrió su puerta y se lanzó en paracaídas, precedido por la supuesta Reina, mientras sonaba la conocida música de 007 y ella ignauro los Juegos Olímpicos.
El ciclista británico Bradley Wiggins, reciente vencedor del Tour de Francia, tocaba la campana que ponía en marcha la ceremonia.
Bajo la dirección de Danny Boyle fueron 90 minutos , la ceremonia ofreció una bienvenida "muy británica" a los más de 10.000 deportistas de 204 Comités Olímpicos Nacionales. El desfile de los atletas alargará el evento otra hora y media, según cálculos de los organizadores.
La puesta en escena de una ceremonia que ha costado más de 33 millones de euros derrochó efectos especiales propios del cine, el terreno donde mejor se mueve Boyle, director de "Trainspoting" y "Slumdog millionaire".
El fuego y las luces fueron protagonistas, fue la música pop británica, una de las grandes referencias culturales de este país, y así sonaron melodías de Mike Oldfield, los Rolling Stones, con "Satisfaction", y por supuesto los Beatles.