Tiempo para Compartir

Todos los niños asisten a lo que llaman “apertura”. Los niños empiezan esto con una oración, seguido por una escritura, anuncios, una canción y discursos. Al terminar este punto de la Primaria, los niños se separan en sus respectivas clases. Estas clases pueden subdividirse según la cantidad de niños que haya en la Primaria.

Mientras los niños más grandes están en su clase, los niños pequeños están en su “Tiempo para Compartir”, este permite que los niños tomen parte en las actividades y aprendan del Evangelio cantando canciones que mencionan los principios de la Iglesia.

El tiempo para compartir está bajo la dirección de la Presidenta de la Primaria, siendo ésta una oportunidad para que la presidencia interactúe con los niños y les enseñe principios del evangelio. Cada mes debe realizarse una presentación, la cual está a cargo por cada clase.Cuando termina este tiempo, los niños mayores vuelven para tener su “Tiempo para Compartir” y los pequeños van a recibir su clase.

No todas las Primarias tiene el Tiempo para Compartir por separado, esto depende de la cantidad de niños que haya, cuando hay pocos niños, por lo general, se empieza con la apertura, se dividen en clases y regresan todos juntos al tiempo para compartir.

Las clases que se les enseñan a los niños son obtenidas de manuales especiales que proporciona la Iglesia .

Todas las lecciones tienen un resumen con el propósito de cada lección, seguido de una guía para la preparación del maestro, las actividades, las preguntas y la discusión, historias y actividades adicionales relacionadas al tema. Los maestros son alentados a mantener la lección enfocada en lo que se sugiere en el manual, pero deben procurar enseñar por el Espíritu y de acorde a las necesidades de los niños.